FEBRERO 24 Antonio, el gestor económico de la oficina de al lado, me ha traído impreso su relato, el que hace unos meses se propuso terminar para enviarlo a un premio literario. Lo ha hecho, el fallo será en mayo. Me lo dio el lunes y ha dicho que puedo darle mi parecer. No supo lo que hacía, he leído los diez folios en la madrugada de hoy, jueves. Y le llené los folios de anotaciones a lápiz, para luego, esta mañana, darle mi parecer. Me ha estado escuchando veinte minutos, le hablé de la voz del narrador, de que el lector sabe lo que sabe el personaje, ve lo que el personaje (lo que se haría usando una primera persona), aunque a través del narrador (el narrador reproduce los pensamientos del protagonista y sus vivencias), lo que lleva a un extraño lío: hay diálogos con la voz y el registro del personaje, pero contados po...